VIAJE A RUFFEC. LOS TRABAJADORES DE MEDINA

Hoy hemos estado en el meollo de la cuestión, hemos visitado a los trabajadores de Medina que están contratados a través de la Asociación Amistad Casas Viejas en una plantación de tabaco de esta región de Francia.

Descansados y con las pilas cargadas, por la mañana nos hemos dirigido al pueblo a visitar la empresa que tiene uno de los miembros de la asociación y donde está empleado Javier desde hace cinco meses, un padre de familia de Medina al que le iban a quitar su casa porque no podía pagar su hipoteca. Se trata de una empresa familiar de fabricación de muebles y artesanía de la madera en la que se hace todo el proceso desde el árbol hasta el comprador, así hemos visto desde la pila de troncos, pasando por todo el proceso de trabajo de la madera hasta el diseño final y puesta en venta. Una empresa que emplea a más de quince personas y que ofrece sus productos en acontecimientos tan emblemáticos como el festival de cine de Cannes o a marcas muy conocidas de bebidas. En sus instalaciones se encuentra una de las dos chicas del ÍES CASAS VIEJAS que están haciendo las prácticas en Ruffec, dos estudiantes que se encuentran acogidas en la casa de una familia de la Asociación y que nos han manifestado que no tienen ganas de irse por lo bien que se encuentran aquí.

Pero lo mejor ha venido por la tarde cuando hemos visitado a los diez trabajadores de Medina que se encuentran alojados en una casa de campo y otra casa en el centro de Ruffec cedidas por miembros de la asociación. Todos nos han confirmado lo que nosotros veníamos anunciando desde que conocimos este proyecto de la mano de Antonio Cruz. Todos han contestado casi al unísono sobre las buenas condiciones de trabajo, la excelente atención por parte de la asociación, las facilidades en cuanto al aprendizaje del idioma o cuestiones relacionadas con las comunicaciones o la asistencia sanitaria. Y por supuesto, todos han contestado al unísono que no han tenido que pagar ni un sólo euro para acceder a este contrato de trabajo.

Vienen por poco tiempo, quince días, pero con la esperanza de que puedan venir más adelante y por mucho más tiempo, por eso se preocupan de aprender el idioma y dejar una buena impresión a los empresarios que los han contratado y a las personas que los han acogido en sus casas. Principalmente porque el trabajador andaluz que sale a trabajar fuera siempre se ha comportado así, pero también lo hacen para dar la oportunidad a otros que como ellos podrán venir a continuación.

No ha habido ningún problema en que podamos grabar sus declaraciones y por supuesto no tienen ningún miedo a que se conozca la verdad porque están profundamente agradecidos a la forma en que los han acogido tanto en sus alojamientos como en la empresa donde están trabajando y vienen con el apoyo de su alcalde.

Nos contaron que a un grupo de ellos no les gustó el sitio adonde los alojaron en un principio y cómo rápidamente la asociación se puso en marcha para organizar una comida en la que reunieron a más de trescientas personas y recaudaron fondos para amueblar una casa en RUFFEC para que pudieran estar mucho más cómodos. Ha sido mucho mejor de lo que hubiéramos pensado en un principio, dijo uno de ellos emocionado.

Antonio Cruz ha explicado la forma en la que el ayuntamiento de Medina ha organizado la selección de los candidatos y cómo de un total de quince currículum preseleccionados, el empresario ha escogido a diez de los mejor adaptados al trabajo que tenían que desempeñar. Nos ha contado que quedan muchas personas esperando y que están trabajando para que pronto puedan venir muchos más en las mismas condiciones.

Nosotros hemos agradecido a estos trabajadores que nos atiendan en esta visita a la que hemos sido invitados por la Asociación en representación de una buena parte de nuestro pueblo que, como nosotros, desea conocer la verdad de este proyecto de primera mano. Los hemos felicitado por aprovechar esta oportunidad y les hemos deseado que puedan seguir contando con la asociación todo el tiempo que lo necesiten. Cuando nos han preguntado qué nos parece todo esto, les hemos dicho simple y llanamente que es una oportunidad perdida por Benalup-Casas Viejas, a donde venía destinado este proyecto en un principio y que nos alegramos de que al menos se haya podido beneficiar Medina una vez que fue rechazado por nuestra alcaldesa.